Por un lado, el mandatario presidirá el viernes un encuentro en la sede de la CGT en CABA, organizado por la cúpula de la central sindical. En tanto, el sábado, la vicepresidenta será la principal oradora de una actividad que se llevará a cabo en la ciudad bonaerense de Ensenada.
El presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezarán el viernes y el sábado próximos, respectivamente, sendos actos de homenaje por el 48° aniversario de la muerte del líder justicialista Juan Domingo Perón, que se conmemora el 1° de julio.
El Presidente encabezará el viernes un acto en la sede de la CGT, en Azopardo 802 de la ciudad de Buenos Aires, organizado por la cúpula de la central sindical y con invitaciones a la dirigencia del PJ -del cual Fernández es presidente-, gobernadores, intendentes y organizaciones sociales, entre otros actores del peronismo.
En tanto, el sábado, Cristina Fernández de Kirchner será la principal oradora de una actividad que se llevará a cabo a partir de las 16 en el Polideportivo Municipal de la ciudad bonaerense de Ensenada, según informaron fuentes allegadas a la exprimera mandataria.
Inicialmente, la Vicepresidenta tenía previsto realizar el acto de Ensenada el viernes, que es el día del aniversario de la muerte de Perón, pero prefirió posponerlo para el sábado para despejar la actividad del Presidente en la CGT.
El evento en Ensenada contará con la presencia del jefe de La Cámpora y presidente del Partido Justicialista bonaerense, Máximo Kirchner; del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof; y del intendente local Mario Secco, entre otros dirigentes del peronismo provincial.
Allegados a la Vicepresidenta de la Nación, expresaron a esta Agencia, que la segunda aparición de Cristina Kirchner en menos de 15 días es parte de la estrategia que pondrá en marcha la ex mandataria, quien se fijó el objetivo de aparecer en una actividad pública cada dos semanas para marcar su mirada política y los problemas que observa en la gestión.
Perón falleció el 1° de julio de 1974 en la Quinta de Olivos, a meses de haber asumido su tercer mandato presidencial, como consecuencia de un paro cardíaco derivado de la cardiopatía isquémica crónica que padecía.
Lo sucedió su esposa, la vicepresidenta María Estela Martínez de Perón, quien fue derrocada por un golpe de Estado cívico-militar el 24 de marzo de 1976.
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