Una multitud participa del cierre de festejos del Año Nuevo Chino, que comenzaron el 25 de enero, con un megafestival en Plaza Parques Nacionales Argentinos, en el porteño barrio de Belgrano.
«Este evento sirve para que junto al pueblo argentino podamos mandar nuestro mensaje de solidaridad al pueblo chino ante la situación que están atravesando por el tema del coronavirus», dijo Carola Chen, vocera de la organización de los festejos de este año.
El megafestival de cierre cuenta con una variada gastronomía china y de otros países, además de demostraciones de artes marciales, shows, música en vivo y la infaltable danza de dragones y leones.
De esta manera Buenos Aires recibe el año de la «Rata de Metal», número 4.718, con un evento que se desarrolla hasta las 20 en avenida Figueroa Alcorta y Sucre.
«Este año entramos a el año de la Rata de Metal, que es el primer animal del horóscopo chino, lo que significa que vamos a andar corriendo como los ratoncitos para concretar los sueños y proyectos que veníamos pensando hace rato. Es decir, ir paso por paso para llegar a nuestra meta», indicó Chen.
El público pudo degustar de los platos típicos como las empanadas chinas, arrolladitos, brochette y comida a la plancha.
También «tenemos té con leche con las perlas de mandioca que se consume muchísimo en el resto del mundo y acá recién se está dando a conocer», indicó Chen.
La organización calculaba que este año el flujo de público superara las 100.000 personas, cuando el año pasado fueron unas 80.000.
El 26 de enero, el tradicional festejo se trasladó a Puerto Madero, donde se realizó una regata de «dragon boats» o barcos dragones, un deporte náutico de más de más 2200 años de antigüedad, con la ceremonia de «despertar al dragón».
