El gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, dijo hoy que espera que en su provincia se puedan retrotraer los índices de indigencia «al menos hasta lo que habíamos logrado bajarla en el último trimestre del 2015″ -en su segundo mandato-, al evaluar que la política de (el ex presidente, Mauricio) Macri fue totalmente nociva en términos sociales».
Las declaraciones de Capitanich se producen luego de que ayer el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, lanzó en el Chaco la Tarjeta Social Alimentaria en el marco del ‘Plan Argentina contra el Hambre’, la que beneficiará en principio a unas 66.499 familias que cobran la Asiganción Universal por Hijo (AUH).
«En Chaco habíamos mejorado mucho los índices de desigualdad (durante su gestiones entre 2007-2011 y el 2011-2015), pero tuvimos un retroceso en estos años de Mauricio Macri donde la indigencia prácticamente se cuadruplicó», dijo el gobernador en AM 530.
«Por eso el desafío con esta Tarjeta Alimentaria, más otras acciones que vamos a tomar, es poder al menos volver a los índices de indigencia del tercer trimestre del 2015«, precisó, al destacar que el número rondaba el 4 por ciento.
Capitanich continuó con que «en materia social, esas políticas fueron totalmente nocivas: se cortó el financiamiento para obras de infraestructuras básicas, y se discontinuó la ejecución de viviendas populares, entre otras cosas».
Por otra parte, consultado sobre el vínculo entre el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner, agregó que “la concepción del gobierno es la unidad en la diversidad», y que «la jugada magistral de Cristina de ponerse como vicepresidenta fue extraordinaria».
«A partir de ahí ella busca apuntalar la gobernabilidad y generar las condiciones para que quien ejerce el mandato de Presidente lo pueda hacer conforme al programa de gobierno», dijo.
El gobernador del Chaco consideró también que «ambos adquieren una complementación clara, se conocen muy bien», y la definió como una «fórmula perfectamente ensamblada».
En tanto, se refirió al Poder Judicial y a cómo cree que debe funcionar a nivel nacional: «No podemos alentar revanchismos, pero tampoco convivir con un sistema putrefacto. Por eso, lo mejor es apelar a la transparencia».
«Argentina necesita de ejemplaridad, políticas anticorrupción, y garantizar un sistema de financiamiento transparente, pero cuando existe infección estructural por corporaciones, medios, o servicios de inteligencia, esto se vuelve una calamidad», insistió.
En este punto, se mostró partidario de «una reforma» que «siente las bases con transparencia, sin corrupción, pero con calidad institucional».
