Con el grito «El agua de Mendoza, no se negocia», ambientalistas exigen que se vete la Ley que permite el uso de químicos en la minería. Multitudinarias marchas.
Desde que se modificó la Ley 7.722, las movilizaciones y las protestas en reclamo por este cambio se suceden casi de manera cotidiana en Mendoza. Incluso, hubo una marcha que llegó hasta la sede de Gobierno y que terminó con incidentes, detenidos y heridos. Ahora, los vecinos y asambleístas se preparan para una nueva serie de acciones para exigir que se veten esta norma que permiten el uso de químicos en la industria minera provincial.
Este jueves, a las 10 de la mañana en la sede del SUTE, vecinos autoconvocados y miembros de la «Asamblea del Pueblo de Mendoza por el Agua» (Ampap) se reunirán para definir cuáles serán los próximos pasos en las protestas que se fueron sucediendo bajo el lema: «El agua de Mendoza, no se negocia«, por lo cual invitaron a toda la población a «seguir encontrándonos porque la Ley 7722 No se Toca».
Además, en San Rafael, al sur de la provincia, ya se realizó una nueva convocatoria para que se realice una concentración, a las 19 de este jueves, en San Martín y Mitre, en pleno centro de la ciudad, para continuar con el reclamo contra la modificación de la norma que fue impulsada por el gobernador Rodolfo Suárez.
Hasta el momento, existen grupos de vecinos que se han congregado en asambleas no solo en la capital provincial y San Rafael, sino también en San Carlos, Tunuyán, Huanacache (Lavalle), Las Heras, Tupungato, Uspallata, Tunuyán, la Popular (de la ciudad), Malargüe, General Alvear, Asamblea por el Arbol, Zona Este, Maipú, Luján y Godoy Cruz.
«Nuestro pueblo ha comprendido el peligro que significa tener la actividad megaminera aguas arriba en toda nuestra cordillera. Esta es la razón de fondo de la masividad del reclamo actual. Hay una crisis de representación porque no tienen licencia social», aseguraron los asambleístas y criticaron «el modo en que se quiso imponer la ley, lo que ha generado que toda la sociedad esté unida en esta lucha».
En ese sentido, Mariana Guzzante, periodista y guionista mendocina, relató: «Estamos todos comunicados en grupos de whatsapp y la percepción es que esto finalmente cerró la grieta en las familias. Anoche en la cena de Nochebuena, los macristas y kirchneristas estaban juntos brindando por el agua. Las familias se han vuelto a unir en una lucha común por cuidar nuestra agua en medio de una crisis hídrica importantísima».
«Además de seguir en las calles, necesitamos que todos los sectores de la sociedad mendocina se expidan en defensa del agua pura exigiéndole al gobernador Rodolfo Suárez y a la cúpula del PJ que den marcha atrás con esta ley inconstitucional. La 7.722 no se toca», resaltaron desde la AMPAP a horas de que se realice el encuentro.
Por su parte, la Comisión de Reinas Nacionales de la Vendimia se sumó a los reclamos y pidió que «no se realice ningún acto previsto para las fiestas de Vendimia 2020, hasta que se de marcha atrás con esta reforma que pone en peligro nuestro recurso más preciado que es el Agua».
«El gobierno promulgó las modificaciones pasando por arriba de los mendocinos que pacíficamente pidieron el veto. Frente a la negativa por parte del gobernador Rodolfo Suárez para retrotraer la modificación que habilita el uso de contaminantes como cianuro o ácido sulfúrico, y el rechazo a la protesta, creemos necesario y urgente que no se realice ningún acto previsto para la Vendimia 2020», explicaron en un comunicado.
El abogado ambientalista Enrique Viale, en tanto, adelantó que llevarán adelante una presentación judicial. «Si no sacamos el veto, sacamos la inconstitucionalidad«, afirmó el letrado e instó a la población a «seguir la lucha en las calles, protestando sin vendimia, y lo que sea, porque se está nacionalizando la protesta y se está ganando».
