La propuesta de un plazo acotado para el cargo del procurador General de la Nación «no debe llamar la atención», sino que «es algo muy típico de las legislaciones con sistema acusatorio», explicó la exprocuradora General de la Nación.
La exprocuradora General de la Nación Alejandra Gils Carbó dijo este lunes que «el delito es dinámico» y requiere adaptación permanente para combatirlo, y por lo tanto «es incompatible con un procurador vitalicio», en referencia a la reforma de la ley del Ministerio Público Fiscal.
En diálogo con radio El Destape, Gils Carbó agregó que «si el procurador tiene un plazo acotado de gestión, «la mayoría absoluta es totalmente razonable» para su designación.
Explicó que la propuesta de un plazo acotado para el cargo del procurador General de la Nación «no debe llamar la atención», sino que «es algo muy típico de las legislaciones con sistema acusatorio».
En ese sentido, consideró que pasar al sistema acusatorio implica «un proyecto de modernización» y recordó que «cuando no está definido quién investigaba, ni el juez ni el fiscal tienen dispositivos propios y se delega la investigación en la policía».
Por eso, dijo, el sistema acusatorio se propone «como una manera de superar ese límite o prevalencia de la delegación policial».
El bloque de senadores del oficialismo buscará aprobar esta semana en el recinto de la Cámara alta la propuesta de reforma de la ley orgánica del Ministerio Público Fiscal y, a través de ella, la forma de elección y el tiempo de mandato del procurador General de la Nación, durante una sesión especial que sería convocada para el viernes.
Por otro lado, Gils Carbó señaló que la lucha contra el crimen organizado requiere «que el Ministerio Público sea dinámico y tenga cuerpos propios de investigación» y para eso necesita «un procurador que esté todo el día mirando la realidad, y asignando recursos» según las nuevas modalidades del delito.
«El delito es dinámico y eso es incompatible con un procurador vitalicio», insistió.
En particular, sobre los métodos de designación del jefe de los fiscales, consideró que cuando es un cargo vitalicio, «al estilo monárquico» se entiende «más razonable una mayoría muy calificada» para elegirlo.
En cambio, «si el procurador tiene un plazo, la mayoría absoluta es totalmente razonable», según opinó.
De todos modos, la exfuncionaria destacó que «uno puede tener teorías, pero lo que hay es un problema práctico», porque a diferentes Gobiernos les ha pasada no lograr los dos tercios para designar al procurador.
«Hay una demora que ha significado que el cargo de procurador está vacante hace 3 años, es un déficit institucional muy importante», observó Gils Carbó, que consideró que eso «no pasa en otros países».
Consultada sobre los dichos del presidente Alberto Fernández, que durante el fin de semana sostuvo que «los que se oponen a la designación de (Daniel) Rafecas son los mismos que sacaron a Gils Carbó» de su cargo, la exfuncionaria coincidió con esa definición, y agregó que «tampoco nombraron durante su gobierno» un procurador, en referencia al macrismo.
«No es una conducta respetuosa de las instituciones», acotó.
Finalmente se refirió a la deuda del Correo Argentino por parte del grupo Macri y la tarea de la fiscal Gabriela Boquín en el tema.
«Cuando veo lo que le pasa a la fiscala Boquín, veo lo que me pasaba a mi cuando estaba en esa fiscalía. Cada vez que hacía un dictamen que no agradaba a un grupo del poder económico empezaban los pedidos de juicio político», recordó.
