Sin público ni los tradicionales festejos y desfiles por las medidas sanitarias ante la pandemia de coronavirus, Rosario homenajeó hoy al creador de la bandera nacional a 200 años de su muerte con un acto lo encabezado por el presidente Alberto Fernández a través de una videoconferencia.
Luego de escuchar el Presidente la promesa de lealtad a la bandera a alumnos de cuarto grado de todas las provincias desde la residencia de Olivos, la ceremonia continuó en el Monumento Nacional a la Bandera de Rosario.
Allí el gobernador Perotti afirmó desde el Monumento que «Belgrano confiaba en un cambio cultural y no consideraba un destino inexorable a la pobreza; él creía en el estudio y en el trabajo como los grandes generadores de riqueza y ordenadores sociales».
«Invertir en ciencia y educación es fundamental, pero también lo es darle un lugar institucional», agregó.
En el ingreso del Monumento, se recreó el izamiento de la insignia patria del 27 de febrero de 1812 con dos actores que representaron a Belgrano y a María Catalina Echevarría, una vecina de la entonces Capilla del Rosario a quien se le atribuye haber cocido la primera versión de la bandera.
También, a través de un video, Juan Carlos Baglietto cantó una versión de la «Marcha a mi Bandera» con Lito Vitale acompañando en piano y, en violín, un alumno de la Escuela Provincial de Música, Dylan Villanueva.
En tanto, el intendente de Rosario, Pablo Javkin, dijo que «se recordará este 20 de junio como el del bicentenario de la muerte de Belgrano y también el de la incertidumbre, la boca cubierta y la distancia social».
El jefe comunal señaló que Belgrano «amaba la ciencia y recurrimos a ella hoy en busca de un nuevo mañana», y destacó el rol del abogado y militar en torno a la «unión» de los argentinos y a la bandea como símbolo de esa búsqueda.
Belgrano fue «un argentino que enarboló como ningún otro una idea y palabra que nos sigue haciendo falta: ‘unión'», dijo el intendente.
«Tanto la pensó a esa palabra que la hizo su bandera y nos la regaló a todos; aquel pedacito de cielo que flamea es eso: un símbolo de unión», concluyó Perotti.
